La guarda oclusal es un dispositivo dental diseñado para proteger los dientes y las estructuras circundantes de los efectos nocivos del bruxismo, el cual es el hábito involuntario de apretar o rechinar los dientes, especialmente durante la noche. También se conoce como férula de descarga, férula oclusal, o placa de mordida.

Estos dispositivos suelen ser fabricados a medida por un dentista a partir de modelos de los dientes del paciente. La guarda oclusal se coloca en la boca durante el sueño y sirve para varios propósitos:

1 – Protección dental: Ayuda a prevenir el desgaste excesivo de los dientes debido a la fricción causada por el bruxismo. Esto es importante porque el desgaste constante puede conducir a problemas dentales como sensibilidad, dolor en las mandíbulas y pérdida de esmalte dental.

2 – Alivio de la tensión en la mandíbula: La guarda oclusal redistribuye las fuerzas de masticación, ayudando a aliviar la tensión en la mandíbula. Esto puede ser beneficioso para las personas que sufren de trastornos temporomandibulares (TMD) o síntomas como dolor de cabeza y dolor facial asociados con el bruxismo.

3 – Prevención de problemas en las articulaciones temporomandibulares: El bruxismo puede contribuir al desarrollo de problemas en las articulaciones temporomandibulares (ATM). La guarda oclusal ayuda a reducir la presión sobre estas articulaciones, lo que puede ayudar a prevenir o mitigar los problemas asociados.

4 – Mejora del sueño: Al reducir el rechinamiento de los dientes durante la noche, la guarda oclusal puede contribuir a mejorar la calidad del sueño.

Es importante destacar que el uso de la guarda oclusal debe ser recomendado y supervisado por un dentista. El profesional evaluará la necesidad de este dispositivo en función de la condición dental y la salud bucal del paciente.